Un paraiso perdido donde puedes encontrar todo y nada, capaz de lo mejor y lo peor, porque el término medio es solo un espejismo visto desde los extremos

20.10.05

Un día sí y otro también

Estos días no son los mejores para mis neurax: mi libertad ha sido secuestrada por normas ético-morales obsoletas y se limita a cambiar de canal con el mando de la tele, mi juventud se arrepiente de su edad, y encima, mi simpatía no esta de muy buen humor últimamente. Con todo esto, y antes de probar la peor solución (una borrachera al uso), me voy a tomar un descanso mental. Me retiraré a mi isla a disfrutar de la tranquilidad y de una buena canción. Os lo recomiendo, a lo mejor lo único que necesitaís es daros cinco minutitos de relax...



Powered by Castpost

Etiquetas: ,

18.10.05

Blade Runner...

[Deckard llega cansado a su apartamento. Entra en el ascensor ]
Ascensor: Identificación de la voz. Su número fónico, por favor.
Deckard: Deckard 97.
Ascensor: 97, gracias.
[ Deckard siente la presencia de alguien más en el ascensor. Saca rápidamente su pistola y apunta a Rachael. Se abren las puertas del ascensor ]
Rachael: Quería verle. Así que esperé. [ La tarjeta-llave de Deckard cae al suelo ] Déjeme ayudarle.
Deckard: No necesito ayuda.
Rachael: No sé por qué él le dijo lo que ha hecho.
Deckard: Hable con él.
Rachael: Ya no me recibirá.
[ Deckard entra en su apartamento y cierra la puerta; al poco, vuelve a abrir para que Rachael pueda pasar ]
Deckard: ¿Quiere una copa, eh? ¿No?
Rachael: Cree que soy una replicante, ¿verdad? [ Rachael muestra una foto a Deckard ] Mire. Soy yo con mi madre.
Deckard: Sí. ¿Recuerda cuando tenía seis años? Usted y su hermano se metieron en un edificio vacío por la ventana del sótano. Iban a jugar a médicos. Él le enseñó su sexo, y, cuando le tocaba hacerlo a usted, se avergonzó y corrió. ¿Lo recuerda? ¿Nunca se lo ha contado a nadie? ¿A su madre? ¿A Tyrell? ¿A alguien? ¿Recuerda la araña que vivía en el arbusto junto a su ventana? Con el cuerpo naranja y las patas verdes... La vio tejer una tela durante todo el verano. Un día apareció un huevo en ella. El huevo eclosionó...
Rachael: El huevo eclosionó.
Deckard: Y...
Rachael: Salieron cientos de crías de araña que se la comieron.
Deckard: Implantes. Esos no son sus recuerdos. Son los de algún otro: los de la sobrina de Tyrell. Está bien. Un mal chiste. He hecho un mal chiste. Usted no es una replicante. Váyase a casa, ¿de acuerdo? No, no, de veras. Lo siento. Váyase a casa. ¿Quiere una copa? Le serviré una. Voy por ella.
[ Rachael mira la foto por última vez y la tira al suelo. Sale corriendo del apartamento. Deckard recoge la foto y la observa. El trozo de papel parece cobrar vida ]
Deckard (voice-over): Tyrell hizo un buen trabajo con Rachael: de una foto sacó una madre que ella nunca tuvo y una hija que ella jamás fue. Se supone que los replicantes no tienen sentimientos. Y que tampoco los tienen los bladerunners. ¿Qué demonios me estaba pasando? Las fotos de Leon tenían que ser tan falsas como las de Rachael. Yo no entendía por qué un replicante coleccionaba fotografías. Quizá eran como Rachael: necesitaban recuerdos.

Etiquetas:

13.10.05

Ensalada de percepciones

Primero y antes que nada, he de decir que no he escrito desde hacía tiempo porque sencillamente, no estaba en vuestro mundo, me quedé en el mío, entrenándome a la espera de mi próximo combate por la corona de la eterna tranquilidad. Además, no pienso pedir disculpas pues si de algo estoy seguro, es que tenemos distintas percepciones del tiempo, un par de meses vuestros es para mí un clic, ni siquiera llega al típico suspiro.
En mi mundo, el tiempo fluye intermitentemente y se esfuma divagando sobre mis variopintas percepciones, en las que cualquier parecido con las realidades son pura coincidencia. Tengo la extraña habilidad de mendigar por todos los sectores de la sociedad y picar de lo mejor y lo peor en cada uno de ellos. Tan pronto soy una víctima inconformista de todas las necesidades fabricadas por el capitalismo, como me muero por una sobredosis de humildad.
Mis sensacines son como un déjà vu contínuo en forma de holograma, estoy presente pero no existo como tal, a veces, me conformo con ser la pieza perdida de un puzzle vital que está a años luz de mí. Y mientras, observo como la gente sigue viviendo y contanto el tiempo en recuerdos, anécdotas, en meses y en años que para mí, no han pasado, todo sigue prácticamente igual salvo pequeñas variaciones de formas, colores, tempos y posiciones. Mi tránsito vital transcurre fotocopiando año tras año, todos estos últimos años me parecen el mismo, mis percepciones no cambian con el factor tiempo, son las mismas que tuvo el primer homo sapiens cuando empezó a sentir algo por sus semejantes. Tampoco creo que el mundo haya cambiado mucho desde entonces, simplemente hemos aumentado las herramientas y las necesidades más de la cuenta. Pero bueno, aunque no esté tan seguro, parece que lo que es es lo que hay, menos mal que siempre habrá una buena canción ad hoc para sobrevivir mientras saboreo mi ensalada de percepciones.

Etiquetas: