Un paraiso perdido donde puedes encontrar todo y nada, capaz de lo mejor y lo peor, porque el término medio es solo un espejismo visto desde los extremos

7.9.07

Slow Motion


Parece que llega un momento en que la gente ya no tiene tiempo para casi nadie. Aquellas llamadas desinteresadas de antes para ver que tal había ido el día dejan de existir para dar paso a otras tan interesadas o con un fin tan concreto que una vez aclarado el tema de la llamada, lo demás resulta irrelevante. Aquello de que los tiempos cambian es una solemne tontería encubierta por lo que en realidad no deja de suceder, el tiempo pasa y no se detiene ante nada ni nadie.

Es mi lucha constante, la sensación de que mientras hago una cosa, estoy perdiendo un tiempo irrecuperable para hacer otras muchas, y eso me asfixia, no me enfada ni me entristece, simplemente me asfixia. Sólo en determinadas ocasiones consigo olvidar esta sensación, y es entonces cuando me digo que el reloj es relativo, que los tiempos avanzan de manera diferente para según que cosas, que merece la pena mirar para otro lado, y qué, quizás, yo tenga la culpa de todo ello.

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