Still alive

Parece mentira pero aquí estoy otra vez. Ya sabía que era muy optimista al pensar que iba a ser capaz de escribir con asiduidad pero es que últimamente el yugo vital de mi existencia me tiene apartado de las máquinas. Además, acabo de leer mi anterior post y me parece infame, pero bueno, se parece a lo que pienso y lo hecho hecho está; ya dije que era capaz de lo mejor y lo peor, y lo mejor aún está por llegar (eso espero).
La verdad es que cuando me planteé hacer el blog, todo eran ideas estupendas que burbujeaban en mi cabeza, pero llegado el momento no consigo materializarlas y es ahora cuando me atenazan las dudas, el papel y la pantalla en blanco me producen un vértigo nada aconsejable. Había pensado en darle al blog una temática concreta y definida pero necesitaría hacer lo menos unos 10 blogs para satisfacer mis neurax, así que prefiero formar una amalgama indefinida de ideas variadas, y aprovechando que la filosofía barata está de rebajas, me voy a permitir el pequeño lujo de escribir también sobre esa especie animal tan singular, diversa y que absorbe toda mi atención y admiración: el homo sapiens.
En fin, tengo que organizarme mentalmente para poder plasmar algo parecido a lo que se me ocurre en los momentos menos oportunos, justo cuando no tengo posibilidades materiales de eternizarlo, por eso, necesito disponer de tiempo y espacio y esto, sale bastante caro hoy en dia. Por otro lado, también necesito nivelar mis biorritmos, un tanto alterados por circunstancias de la vida. En un momento dado si notais que me quejo demasiado por todo, no lo tengais en cuenta, es un defecto que viene de fábrica y, además, también forma parte de la terapia.
Nos vemos en Waikiki Beach!